En la «era del cliente» los consumidores ejercen un control cada vez mayor en su interacción con las marcas.
Para satisfacer sus necesidades, en una economía cada vez más digital, las empresas necesitan transitar una transformación que implica repensar sus procesos y adoptar nuevas tecnologías y procesos ágiles enfocados a maximizar la experiencia integral del cliente.
La transformación digital, se puede aplicar a una organización o a un proceso particular, gestionando metodológicamente el cambio.
El proceso comienza planteando y respondiendo las preguntas adecuadas
¿Qué queremos lograr?
- ¿Cuál es el objetivo de largo plazo?
- ¿Qué necesitamos hacer primero?
- ¿Qué conocimiento y capacidades tenemos y necesitamos?
- ¿Qué necesitamos conectar con que?
¿Por qué hace falta transformar y a quien necesitamos?
- ¿Porque vemos la necesidad de transformar?
- ¿Quién lo puede validar?
- ¿A quienes debemos involucrar?
- ¿Quién puede conectar cada pieza?
¿Quién nos puede ayudar con el “que”?
- ¿De qué manera se involucra el cliente?
- ¿Quién hace cada cosa? ¿Quién toma el liderazgo?
- ¿Qué ecosistemas podrían potenciar nuestro objetivo?
- ¿Quién “firma la estrategia” y KPis para alcanzar el “qué”?